Soy la Dra. Catalina Esmerado, médico-oftalmólogo especialista en retina. La oftalmología es mi pasión. Una pasión que crece progresivamente a medida que pasa el tiempo y aumenta mi experiencia y conocimiento.

Ser oftalmóloga es el privilegio de tratar y curar a la gente con problemas oculares. El sentido de la visión es extremadamente valioso para las personas. Tener la capacidad de analizar e interpretar los signos clínicos, orientar el diagnóstico, diseñar y realizar un tratamiento para que el paciente gane visión es algo extraordinario.

Desde un principio me sentí atraída por el mundo de la retina y en particular de la mácula. Ambas son partes claves en la visión y anatomía del ojo. Su función es recoger las imágenes del mundo exterior y transformarlas en impulsos nerviosos para que nuestro cerebro las interprete. Son estructuras perfectas pero muy complejas de las que tenemos mucho por descubrir todavía.

He tenido la suerte de trabajar siempre rodeada de equipos de grandes profesionales tanto en la sanidad pública (Hospital de Viladecans) como privada (Hospital Quirón). De ellos, he aprendido y sigo aprendiendo ética, valores y profesionalidad. Es un honor y un privilegio trabajar con compañeros de tan alto nivel.

Inquieta, perfeccionista y amante de mi profesión, le doy gran importancia a la formación continuada y asistencia a cursos y congresos. Me gusta estar actualizada y conocer los progresos científicos en el mundo de la oftalmología, y en particular de la retina. Considero que estar a la vanguardia en mi especialidad es primordial para garantizar la mejor actuación médica y quirúrgica frente a una enfermedad.

Al finalizar la residencia en oftalmología, estuve un año en un prestigioso laboratorio de Montreal realizando mi tesis doctoral. Fue allí donde entré en contacto con el mundo de la investigación y me di cuenta de su importancia en mi práctica clínica habitual. Actualmente, soy investigadora principal en diversos estudios nacionales e internacionales relacionados con las enfermedades inflamatorias de la mácula. Eso implica constancia, implicación y una gran dedicación, pero al mismo tiempo me aporta madurez y mucho conocimiento.

Mi principal reto es apostar por una oftalmología moderna, cercana y de alta calidad poniendo todo mi conocimiento y experiencia al alcance del paciente. Mediante una comunicación abierta, honesta y directa, busco resolver dudas y establecer estrategias de tratamiento individualizadas Een pacientes con enfermedades de la mácula para obtener resultados terapéuticos reales.